Las personas con diabetes deben tener
especial cuidado con sus pies. Es frecuente que pierdan
progresivamente la sensibilidad al dolor y a la temperatura de modo
que sufran roces y heridas que apenas producen molestias. Estos
roces pueden hacerse graves sin apenas dolor y en ocasiones pueden
infectarse generando lesiones importantes como las de nuestro
paciente cuyas fotos presentamos.
Se trata de un paciente que trabaja
con botas de seguridad rígidas. Acudió a la
consulta de enfermería por una pequeña herida en el
talón. En la exploración y tras desbridar se encontró
una lesión mucho mayor que ocupaba toda la superficie del
talón. Además, sin que el paciente hubiera notado
apenas síntomas, tenía un desprendimiento total de la
uña de uno de los dedos además de múltiples
placas de hiperqueratosis plantar. (Imágenes reproducidas con autorización del paciente)
IMAGENES ANTES DE LA CURA
IMAGENES TRAS CURA
El cuidado de los pies comienza con la
compra del calzado.
-Compre los zapatos de calidad evitando
que le queden prietos. Una buena estrategia es usar calcetines de
deporte grueso cuando vaya a comprarlos.
-Deben ser de piel ya que favorecen la
transpiración. Mejor si tienen la puntera alta y ancha.
-Es interesante comprar sus zapatos al
final del día cuando sus pies están un poco hinchados.
¿Y los calcetines?
-Debe usar siempre calcetines con su
calzado y cambiarlos diariamente.
-Al usarlos debe asegurarse que ajustan
bien, sin dobleces o arrugas. No remiende sus calcetines, cambielos por unos nuevos.
-Si los pies se le enfrían por
la noche use calcetines. Mantenga sus pies calientes.
Cuidado diario del pie en el paciente
diabético.
El mejor momento es después del
baño o ducha diario antes de calzar calcetines y zapatos. El
paciente debe explorar sus pies en busca de heridas, ampollas,
fisuras entre los dedos o alteraciones del color de la piel. Las
callosidades y durezas de la planta del pie deben evitarse con una
visita periódica a su podólogo. Favorecen una pisada no
natural sobrecargando unas zonas de la planta donde pueden aparecer
después lesiones.
Seque sus pies bien, también
entre los dedos. Después apliquese crema hidratante para mantener la piel elástica y sana. Aplique la crema en todo el pie pero evite darse entre los dedos. Entonces si todo está en orden ya puede calzarse.
Antes de hacerlo compruebe siempre, de forma rutinaria, que no hay
ningún objeto en el interior del zapato.
Situaciones de riesgo.
- Evite las bolsas de agua caliente,
almohadas térmicas y otros dispositivos que den calor en
contacto directo con sus pies.
-Evite caminar descalzo. En casa y
cuando visite la playa o la piscina.
-No use zapatos muy anchos o muy
estrechos. No utilice ligas o calcetines apretados. Evite el uso de
tacones altos o zapatos de punta muy fina.
Y ante cualquier problema acuda a su
consulta de médico o enfermera.
Agradecemos la colaboración de nuestro paciente para ayudarnos a ilustrar un importante problema de salud en los pacientes diabéticos.
Autores:
EAP Azuqueca de Henares
Raúl Piedra Castro
Natividad González Zayas
Pilar Gimeno Minguez
Blanca Baños Galvez